El Gobierno de Mariano Rajoy supera con creces la dictadura de Franco

Repasando un poco la Historia de España hasta la actualidad vemos que no ha cambiado mucho la situación desde entonces hasta ahora. No hay que referirse a la "modernización" del país sino a cómo se está gobernando el país en estos momento de la mano del Partido Popular. Deja mucho que desear y la cosa cada vez va a peor. No es nada nuevo pues ya ocurrió con Aznar, pero no tan bestia como ahora.

Ya poco asombra lo que está haciendo el Gobierno del Partido Popular de Mariano Rajoy con España. Muy pocos se ponen las manos a la cabeza al grito de sorpresa, aunque cada día aparezcan rocambolescas noticias de sobornos, viajes, tarjetas, juicios ilegales, juicios inútiles, gastos exageradamente enormes en obras innecesarias, recortes y más recortes en todos los ámbitos sociales menos en los empresariales y bancarios; y palmaditas en la espalda de los amiguitos acompañado de favores a muy corto plazo. Hay más asuntos, pero no es plan de alargar mucho este párrafo.

Pero entre todo lo que se encuentra escrito y hablado de la Historia de España de los tiempos del amiguete Paquito Franco, el General Francisco Franco para los amigos, Don Paco para los "señores" y Paquito para la señora Carmen; hay un documento que se titula "LEY DE PRINCIPIOS DEL MOVIMIENTO NACIONAL  de 17 de mayo de 1958". Firmado, por aquel entonces, por el Ministro Subsecretario de la Presidencia del Gobierno,  Luis Carrero Blanco. Ya, también, todos lo conocerán por uno de los episodios negros del terrorismo en España.

Repasando cada uno de los ideales que se aprobaron, en el primero dicta la última frase: "El servicio a la unidad, grandeza y libertad de la Patria es deber sagrado y tarea colectiva de todos los españoles.". Precisamente sí que la gran mayor parte de la población española está unida, pero contra la gran mayoría de políticos y su nivel de corrupción y desfachatez que cada día crece a ritmo vertiginoso. Grandeza, la tuvo en su momento, no se puede negar, pero ahora mismo está en los niveles más bajos de toda Europa, aunque Mariano Rajoy, parece ser que es Presidente del Gobierno de este país, intente decir que España ya va por el buen camino. Y libertad, es algo que parece no estar en el diccionario de muchos de los que gobiernan en organismos locales, autonómicos y, como no, en el nacional.

Pasando al ideal número tres de este documento se puede leer: "España, (...) aspira a la instauración de la justicia y de la paz entre las naciones.". No se puede saber a ciencia cierta a qué "naciones" se refería, si a las que hoy se denominan Comunidades Autónomas, o a las naciones que bloquearon a España en el momento en que se instauró la dictadura en ella. Lo que sí es cierto es que justicia bien poca, sobre todo en lo referente a la parte fiscal y de reparto de bienes monetarios. No hace falta explicar quién se lleva más y quien aporta menos. Cada uno tiene su sistema y cada uno barre para el lado que más le conviene. Y paz, lo que se dice paz entre las "naciones", hay pero justa y tirante. Una tela de araña que con un estornudo se podría romper. Aunque dentro de estas mismas "naciones", sobre todo en una en particular de la que se está hablando mucho, la justicia y la paz entre los que viven en este territorio no es digamos gran ejemplo a seguir. El Gobierno de Mariano Rajoy ha permitod que se llegue a este límite, incluso, sobrepasando la linea roja de la vergüenza y el desprecio hacia unos y otros.

Quinto ideal de esta ley y final de todo el párrafo: "La Ley ampara por igual el derecho de todos los españoles.". Que nadie se alarme, que nadie se rasgue las vestiduras y que todo el mundo mantenga la calma. Es cierto, hoy en día la Ley no ampara a todos por igual y cada uno se la pasa por el forro de los billetes de 500 euros que cada uno tenga en su cartera. Leyes para ricos que garantizan el futuro de los ricos. Leyes para pobres que solo garantizan el futuro de los ricos. Se puede observar como con las Leyes, las empresas de los amiguetes del Gobierno tienen sus privilegios más absolutos y cómo luego tienen sus puestos de trabajo fijos cuando estos dejan la política de manera "obligatoria". Tristes y desolados sabiendo que van a cobrar una barbaridad solo por sentarse en una junta y estar una hora de reunión al mes. Con los bancos, tres cuartos de lo mismo. Leyes para que dar dinero público y así salvarlos de la "quema" mientras el pueblo llano pierde poder adquisitivo de una manera drástica.

Punto ocho de esta Ley, última frase: "Todos los españoles tendrán acceso a los cargos y funciones públicas según su mérito y capacidad.". Se sabe que hay muchos funcionarios que tienen mérito y capacidad para estar en su puesto de trabajo. Por otro lado, se sabe que hay muchos que no. Aunque se haya hecho un barrido para despedir de una manera poco oficiosa a estos funcionarios, quedan otros que están en un nivel superior y que si no son válidos para ese puesto, ya tendrán sitio en otro lugar. Son los llamados políticos. Y en el Gobierno del Partido Popular, legislatura que toca revisar, el baile de políticos entre ministerios y puestos de alto y medio rango es más una fiesta popular, válgase el nombre, que un cambio para poner a personajes más competentes, si es que hay alguno. ¿Mérito? Desde luego que sí, el mérito de ser amigo, familiar o conocido de alguno de los que están en el Gobierno. ¿Capacidad? En resumen, nula para todos.

Hay que agarrarse los machos, que ahora viene el punto clave de todo este post. El punto nueve de esta "maravillosa" Ley. Hay que sentarse bien en los asientos y tomarse una tila porque este tiene miga, mucha miga. 

Dice lo siguiente: "Todos los españoles tienen derecho: a una justicia independiente, que será gratuita para aquellos que carezcan de medios económicos; a una educación general y profesional, que nunca podrá dejar de recibirse por falta de medios materiales; a los beneficios de la asistencia y seguridad sociales, y a una equitativa distribución de la renta nacional y de las cargas fiscales."

Por favor, sin alterarse y sentados con la tranquilidad de estar viendo una buena película. Es un decir, desde luego. Primero de todo "justicia independiente". Qué se puede decir que no sepamos ya aunque ahora parece ser, tal vez no sea un espejismo, que las cosas en manos de la Justicia están cambiando. Pero no al nivel o a la rapidez que los españoles de a pie desearíamos y no a todos los personajes, personalidades y personajillos de la farándula política y no política. Ya vemos cada día el paseíllo de "corneados" que pasan cada día por los juzgados. Algunos de ellos saliendo impunes, otros con cargos pero con una fianza a pagar y otros saliendo al poco tiempo de la cárcel, pagando una fianza con el dinero que han defraudado o han robado de todos los españoles.

Si se analiza la parte de "gratuita" aquí es cuando todos al unísono se oye nombrar a nuestro "queridísimo" exministro de Justicia, Alberto Ruíz Gallardón. Tan amante él de que la Justicia es igual para todos pero pobre de vosotros los que queráis ir a juicios porque los costes, sobre todo para los más pobres, os van a costar un ojo de la cara y un riñón. Eso sí, será gratuita para políticos, empresarios y amigos varios; ya se encargan de que los españoles lo paguemos de nuestros bolsillos.

¿Cómo sería la educación si todos los niños y jóvenes tuvieran lo necesario para ir a sus centros de educación y poder aprender? En pocas palabras, un milagro. Sí que la gran mayoría de niños van a centros educativos a aprender pero, ¿todos van con los medios materiales suficientes para que esa educación sea de calidad? No. Por suerte estos materiales son donados. No precisamente por el Gobierno, como se debía esperar, sino por asociaciones no lucrativas, oenegés y los ciudadanos españoles que hacen lo posible para que a ningún niño les falte lo necesario para ir a aprender a su colegio o instituto, dejando también de lado la calidad del recinto escolar y si son barracones o no. Una ayuda que las familias agradecen enormemente debido a su maltrecho estado económico. Libros, cada vez más caros debido no solo al IVA sino, también, al amiguismo de las editoriales con el Ministerio de Cultura, que han podido ser repartidos y fotocopiados para que todos puedan recibir una educación. Y mejor no hablar de las becas porque habría para escribir el Quijote unas cuantas veces.

Malas caras hay que poner cuando se habla de la asistencia social y la seguridad social. Y no es para referirse de los profesionales sanitarios y educadores y trabajadores sociales, que hacen lo posible para que este país siga adelante y que a nadie le falte de nada. Como no podía ser de otra manera, la referencia es el Gobierno una vez más. Recortes en Sanidad, plantas y camas de hospitales cerradas, Servicios Sociales, Dependencia, ayudas a la infancia, residencias de ancianos, discapacitados... Y la lista no se acabaría en el ámbito social y sanitario. ¿Dónde están esos beneficios? No existen.

Para acabar este punto de la Ley de 1958, llega la "equitativa distribución de la renta nacional y de las cargas fiscales". De lo primero ya se ha hablado con las Comunidades Autónomas. Del segundo tema se puede observar que ocurre lo mismo con ellas pero más con los habitantes de España. ¿Paga igual un rico que un pobre? Rotundamente no. El rico sigue siendo más rico pagando menos que el pobre. Los amigos de lo ajeno pero muy amigos de políticos y Gobierno no saben lo que es una carga fiscal porque apenas existe para ellos. En cambio, los de nivel medio y bajo, si es que existe ya alguna diferencia entre unos y otros, el nivel de carga fiscal a la hora de hacer la Renta es exageradamente superior a la de los personajillos de traje y chaqueta y tarjetas opacas en mano. Gracias también a esta equitativa distribución, la brecha entre ricos y pobres en España es cada vez mayor.

Y por acabar, el ideal número doce. En resumidas cuentas hay que destacar lo siguiente: "El Estado procurará por todos los medios a su alcance perfeccionar la salud física y moral de los españoles y asegurarles las más dignas condiciones de trabajo". De salud física y moral ya se sabe cómo la tenemos los españoles, por los suelos y cada vez más. En lo relacionado con el tema sanitario, la situación es cada vez peor y lo que te rondaré morena. En lo referente a las condiciones de trabajo dignas, llegan a ser tan dignas que los jóvenes y no tan jóvenes de este país tienen que marcharse al extranjero para poder conseguir algo digno en lo que trabajar. Los que se quedan, o tienen suerte o deben elegir lo primero que les caiga en las manos para poder sobrevivir.

Lo mismo ocurre al "patrocinar la investigación científica", no precisamente en España y no concretamente con unas condiciones favorables. Más bien en circunstancias penosas y con pocos o ningún recurso económico para conseguir sacar adelante cualquier proyecto que lleve a España a un nivel superior en cuanto a investigación científica. Gracias a los grandes profesionales que tenemos en este país, con pocos recursos y sus grandes conocimientos se están realizando éxitos de gran importancia europea y mundial.

Y, por favor, que los populares no comiencen a ponerse histéricos con todo esto. Es la época que nos ha tocado vivir. Ya pasó algo light con Aznar. No hablo de los socialistas, porque no estamos viviendo el pasado sino el presente. No comencemos con la "herencia", eso es cosa de otro personaje que tampoco se va a nombrar en este post. Es lo que hay. A algunos les gustará y a otros no. Pero así es la legislatura que nos ha tocado vivir. Seguro que hay más situaciones que contar, pero este post solo es un "breve" resumen.

Este Gobierno ha conseguido que Franco y los suyos se hayan convertido en los Pitufos amorosos de la Historia actual de España. Ahí está la Historia, solo queda saber si queremos repetirla o no. Da igual el Gobierno que sea.